QUE ES EL SEXO RUDO
Sexo rudo ¿Qué es?
Quienes sienten curiosidad por el sexo rudo y aunque les parezca un poco extraño se sienten atraídos por la idea, deben tomar en cuenta que una opción es practicarlo con tu pareja. Eso tiene su importancia no solamente por el disfrute que en ese caso es mayor, sino porque a través de esa practica se logran acuerdos y se establecen límites. Aunque inicialmente infunda temor, debatir el tema con la pareja, investigar, leer, documentarse, informarse, son acciones imprescindibles para quien comienza a pensar en el sexo rudo.
Cuando se decide practicar sexo rudo se debe tener muy claro el tipo específico de practicas sexuales que se desea tener, hay que ser muy específico en el momento de acordar el tipo de sexo rudo que se desea tener, a veces una expresión ambigua puede conducir a excesos con relación a lo que verdaderamente se desea hacer. La comunicación es esencial, todo debe quedar claro, teniendo el cuidado de que una palabra tenga el mismo significado para los que discuten sobre el tema.
Sexo rudo ¿Qué es?
No hay una definición clara de lo que determina el sexo rudo, tampoco de unas practicas en concreto, aunque normalmente pensemos en los mimo, como bofetadas o escupir. La idea que tenemos sobre esta practica es la que hemos visto en las pelis.
Este tipo de actos que también pueden ser en un momento dado fetichistas o masoquismo, pueden brotar solas en una relación, uno de ambos lo piden y se ponen de acuerdo.
¿Qué tipo de sexo rudo deseo?
El tipo de sexo rudo que se desea practicar es algo que debe establecerse claramente. El establecimiento de los límites es muy importante, que quede claro previamente la práctica que deseas intentar, hay que decirlo claramente y explorar que responde la pareja al respecto. Lo que se puede hacer y lo que no se puede hacer, eso tiene que estar clarísimo.
También es conveniente establecer un término que al pronunciarlo cualquier miembro de la pareja indique que hasta ahí debe llegarse, no más allá. Una manera de decir basta. Igualmente debe calibrarse la fuerza de los impactos mediante ejercicios que les asignen un número en una escala del 1 al 5, por ejemplo. Porque el término suave puede significar distintas intensidades de impactos para personas distintas.
El sexo rudo no tiene por qué ser doloroso, en ese sentido el uso de lubricantes puede ser de mucha utilidad. Se recomienda documentarse sobre sus usos de acuerdo a los distintos tipos de lubricantes que existen.
La comunicación es esencial
La comunicación es esencial en la práctica del sexo rudo, no se debe sentir temor de decir no, incluso en contraposición de los acuerdos y los límites establecidos. Si ahora que lo haces no te gusta, dilo. Hazlo saber a tu pareja.
No tiene sentido que continúes con algo que te causa dolor o te molesta. Incluso, si después de intentar saciar tu curiosidad y tener varios intentos te das cuenta que el sexo rudo no te gusta, debes comunicarlo, decirlo sin miedo y parar. El sexo es para disfrutar, no para sufrir o para practicarlo sin gozo alguno.
De igual modo, si te gusta después de comenzar a practicarlo, pide más, pídele a tu pareja lo que te complace. Pon a funcionar tu imaginación, crea escenarios que refuercen tu placer. La iniciativa y la creatividad es muy importantes. Las nalgadas, jalones de cabello, las vendas, las cadenas, los látigos, todos ellos son elementos que pueden detonar tu imaginación para crear ambientes novedosos y creativos para practicar el sexo rudo.
Deja una respuesta